Con homenajes a los fallecidos y desaparecidos en el mar se realizó la procesión de San Salvador

En el marco de la 38° Fiesta Nacional de los Pescadores, se llevaron a cabo los festejos a San Salvador, patrono de la comunidad pesquera. Cientos de fieles que se acercaron a la Parroquia La Sagrada Familia y San Luis Orione para participar de la celebración en honor al santo, recorrieron las calles del puerto escoltados por los abanderados y estandartes y acompañados por la banda de música «Santa Cecilia».

La procesión realizó una parada en la Prefectura Naval Argentina. Allí el Obispo bendijo a la institución y oró por el personal que custodia nuestro mar y cuida a nuestros pescadores. Luego en el Monumento al Pescador, se depositó una ofrenda floral para recordar a todos los fallecidos durante su labor en las aguas.

Al llegar a la Banquina, el Obispo Gabriel Mestre; el Presidente de la Sociedad de Patrones Pescadores, Luis Ignoto; el Jefe de Prefectura Naval Mar del Plata, Prefecto Mayor Aníbal Eduardo Moya; otras autoridades y San Salvador se embarcaron en el buque Francesca para llevar a cabo la tradicional procesión náutica.

Además de las lanchitas amarillas y los buques que siempre acompañan al Santo, participaron embarcaciones del Club Náutico y Motonáutico, el Buque de Instrucción Pesquera «Luisito» de la Escuela Nacional de Pesca y el buque de la Armada Argentina «Punta Mogotes».

Las embarcaciones surcaron las aguas de nuestro puerto y arrojaron al mar ofrendas florales en homenaje a los trabajadores fallecidos en el mar. Luego ingresaron a la Base Naval para arrojar una corona de laureles por los tripulantes del ARA San Juan.

En esta oportunidad, contamos con la presencia de la Fragata Libertad, que arribó recientemente a nuestra ciudad.

Ya en tierra, el Obispo bendijo los fruto de mar y brindó unas palabras a los fieles y a los pescadores presentes: «Nos encontramos en el Puerto de la ciudad de Mar del Plata celebrando la Fiesta de los Pescadores. Brota de nuestro corazón una profunda acción de gracias a Dios por el don bendito del mar y sus frutos que permite el trabajo y la posibilidad real de que el pan cotidiano llega a la mesa de muchas familias. Damos gracias a Dios por el trabajo generoso y abnegado de los pescadores, los hombres de mar, y tantas mujeres que trabajan en los diversos estamentos de la industria pesquera local.»

En su mensaje hizo una súplica para que los gobernantes puedan cuidar y defender las fuentes de trabajo de nuestro Puerto al servicio de la producción y economía local y regional.

«La acción de gracias se une a la súplica. Súplica confiada a Dios para que abra los corazones de todos, especialmente de nuestros gobernantes, para que siempre puedan cuidar y defender las fuentes de trabajo de nuestro Puerto al servicio de la producción y economía local y regional. Que desde el ámbito político se promueva el desarrollo integral, abierto siempre a las nuevas tecnologías pero con una mirada profundamente social donde el centro siempre sea el ser humano y el bien común.